Prevé producir más de 1500 en estas semanas.
La UNLaM distribuyó máscarillas en impresión 3D para prevenir la transmisión del COVID-19 al Hospital Paroissien, al Hospital Balestrini, al Policlínico de San Justo y al Hospital de Niños de dicha localidad, entre otros centros de salud pública del partido de La Matanza. En total, sumará entregas a 20 instituciones en los próximos días.
A partir de un proyecto conjunto del Departamento de Ciencias de la Salud y del Departamento de Ingeniería e Investigaciones Tecnológicas de la Universidad Nacional de La Matanza, ya se produjeron 720 mascarillas. Completan la lista de nosocomios que han recibido entregas el Hospital Municipal Eva Perón, el UPA 18 de Virrey del Pino, el Centro de Salud 7 de Ciudad Celina, el CeSAC 14 y la Unidad Sanitaria Don Juan de Laferrere
La doctora Fabiana Lartigue, decana del Departamento de Salud de la UNLaM, comentó: “En los próximos días, se continuará con la entrega a más centros de salud y ya hay 20 instituciones que nos han solicitado mascarillas”.
“La producción de mascarillas tiene como prioridad a los hospitales y centros de salud públicos, que son los que consideramos que tienen más necesidad”, manifestó Lartigue. Y agregó: “Según la capacidad de producción de mascarillas, se intenta realizar las entregas de forma equitativa; en ocasiones, se puede entregar el pedido completo y, en ocasiones, entregamos una parte de la cantidad que nos han requerido, porque la intención es que todos los centros puedan recibir una cantidad mínimamente”.
Los hospitales y centros de salud pueden solicitar estas mascarillas a través de la página https://unlamcovid19.azurewebsites.net/. En dicho sitio, también se pueden contactar instituciones con la posibilidad de donar materiales para dar sustento a la producción en impresión 3D.
El vicedecano del Departamento de Ingeniería e Investigaciones Tecnológicas de la UNLaM, Gabriel Blanco, indicó que “hasta ahora, tenemos producidas más de 700 mascarillas y la intención es fabricar entre 1500 y 2000; estamos en ese proceso, aunque hay escases de materiales, por lo que también estamos tratando de buscar proveedores junto con la Secretaría de Ciencia y Técnica de la UNLaM”.
“Para la realización de estos elementos de prevención, la UNLaM puso a disposición recursos económicos y también está participando de otras iniciativas para hacer frente a esta pandemia”, aseveró Blanco. Y detalló: “Los departamentos de Salud e Ingeniería, a instancias del rector Daniel Martínez, participan del comité de crisis sanitaria del municipio de La Matanza; estamos desarrollando nuestra propuesta de trabajo y, en caso de que la pandemia siga creciendo, dispondremos de un espacio para albergar camas, por lo que la UNLaM está abierta a cualquier colaboración que se necesite”.
Mascarillas validadas para hacer frente al COVID-19
La decana Lartigue destacó que “se está trabajando muy bien, en un gran equipo, entre ambos departamentos de Salud e Ingeniería, como así también con la empresa Circo Studio que forma parte del Polo Tecnológico de la UNLaM y del Centro de Estudiantes que se encarga de la entrega de las mascarillas a los hospitales”.
Respecto a las mascarillas, Lartigue contó que “antes de iniciar la producción y entrega a los centros de salud, estos productos fueron validos por el Hospital Italiano de San Justo y por el Hospital de Haedo”.
Los diseños de estas mascarillas son de código abierto y la impresión de cada una de ellas demanda aproximadamente una hora y media. “También, tenemos previsto realizar unos elementos para que se puedan abrir las puertas con el codo y unas válvulas de venturi que se utilizan para los respiradores, pero estimamos que podríamos comenzar con ello la semana que viene, porque lo más urgente por ahora es continuar con las máscaras”, afirmó el ingeniero Gabriel Blanco.
Una red de makers para la fabricación en 3D
La fabricación de estos elementos para prevenir la transmisión del COVID-19 es realizadación impresoras de la empresa Circo Studio del Polo Tecnológico de la UNLaM, las cuales operan en este momento desde domicilios particulares.
Asimismo, en coordinación con Circo Studio y la UNLaM, se armó una red de makersde la que también participan estudiantes y profesores que tienen impresoras 3D en sus casas y empresas de la Cámara de Industria y Comercio de La Matanza.
Una vez que las partes de las mascarillas ya están impresas, son retiradas los domicilios particulares y es el Centro de Estudiantes el que se encarga de colocarles el acetato y realizar las entregas destinadas a los distintos centros de salud.
Gabriel Blanco precisó que “la empresa Circo Studio está conformada por docentes y alumnos de ingeniería, la cual también participa de otros proyectos con fin social”.
“También es importante recalcar la donación que realiza la empresa 3R, la cual se especializa en reciclado y también está en el Polo Tecnológico, porque ha aportado materiales para uso médico que también son útiles para prevenir la transmisión del COVID-19, como por ejemplo cubre zapatos y cubre almohadas de friselina”, señalóel vicedecano.
“En una primera instancia, la idea es que estos insumos lo reciban hospitales y centro de salud públicos de La Matanza; quizás, después podamos hacer entregas a hospitales públicos de distritos vecinos”, consideró Lartigue.
Agencia de divulgación científica CTyS-UNLaM
Universidad Nacional de La Matanza