En una agónica definición, el seleccionado nacional derrotó por 3-2 a Brasil y se quedó con el título en Misiones.
Argentina logró un hito histórico. El seleccionado dirigido por Ariel Avveduto se quedó con el título mundial al derrotar a Brasil en un partido épico y con una definición agónica. El conjunto argentino venció por 3-2 a los brasileños y se quedó con el título por segunda vez en la historia, luego del trofeo conseguido en Misiones 1994, cuando también se desarrolló el mundial en esa provincia del norte argentino.
El Polideportivo Montecarlo de Posadas vibró desde muy temprano, 6500 personas se hicieron presentes para observar la gran final entre Argentina y Brasil de la Asociación Mundial de Futsal. Cabe destacar que esta organización no depende de la FIFA y van por caminos separados, incluso, es la más antigua de las dos ya que esta asociación se creó en la década del 30, mientras que FIFA reglamentó el deporte cuarenta años después.
Todo comenzó bien para el seleccionado nacional, el misionero Sandro Antiveros, el único local en un plantel compuesto por mayoría de mendocinos, puso en ventaja a la Selección durante el primer tiempo tras un robo cerca del área brasileña y eludiendo al arquero del conjunto visitante. Minutos después, Diego Da Costa puso el empate para Brasil con el que se irían al descanso.
En el complemento, Argentina fue más, pero no pudo quebrar la resistencia del seleccionado brasileño. Cuando restaban menos de dos minutos para el final del partido, Fernando Hamann puso en ventaja a los brasileños en lo que fue un baldazo de agua fría para los comandados por Avveduto. Para colmo de males, Argentina pudo empatarlo con un penal pero el arquero brasileño atajó el disparo.
Quedaban seis segundos para el final del partido cuando Marcelo Mescolatti, un histórico de la Selección, aprovechó un error defensivo y puso el empate con el que se fueron al alargue. En el tiempo suplementario, Argentina fue superior y Gonzalo Pires puso el 3-2 defenitivo que le valió el título al combinado Albiceleste.
Esta es la segunda vez que la Selección se queda con el título en un Mundial e igualó a Brasil que se consagró por última vez hace 30 años. Este triunfo también es histórico porque Argentina se convirtió en el primer país en ser el campeón del mundo vigente en FIFA y en AMF.
Fuente: El intransigente