El gobernador bonaerense mostró su enojo con los líderes de la oposición, especialmente contra Macri y Patricia Bullrich. «Están en campaña electoral», lanzó.
El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, habló en conferencia de prensa sobre las restricciones frente a la segunda ola de COVID-19 dispuestas por el presidente Alberto Fernández y dejó en claro que el conurbano «adhiere» a todas ellas «de manera taxativa». Más allá de repasar las medidas y referirse a la Campaña de Vacunación, apuntó duramente contra el macrismo y sus líderes por hacer uso político de la pandemia, en medio de la fuerte suba de casos.
Tras las declaraciones del jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, el mandatario bonaerense pidió «sentido común y lógica» para dirigir al Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) por lo que se deben tomar medidas coordinadas y conjuntas. «Si de un lado de la General Paz, se deja hacer cualquier cosa y del lado, se restringen actividades no va a funcionar. El virus no reconoce un lado u otro de la General Paz, contagia de la misma manera», manifestó.
También negó que dichas determinaciones restrictivas se hayan tomado sin bases científicas: «Es mentira, están utilizando políticamente un espacio de tanta angustia que estamos viviendo actualmente. Hay tres millones de muertos en todo el mundo, no es una cosa sencilla y menos todavía una cosa digna de meter adentro de una chicana».
Kicillof aprovechó la conferencia de prensa para dejar a la vista el alza de la curva de contagios y mostró que el epicentro de la segunda ola es la Ciudad de Buenos Aires, teniendo en cuenta los casos por habitante. «Comienza en la Ciudad y después se va extendiendo para el resto de los cordones, luego al interior del país», repitió. Además, sin querer caer en chicanas, remarcó que el sistema privado de salud en CABA está saturado y que muchas personas se atienden en el conurbano bonaerense.
Sobre este tema, siguiendo las medidas tomadas por otros países, el gobernador aclaró: «No nos gusta esto, tampoco que haya cientos de contagios y muertos. Me parece de un oportunismo tan vil cargar las tintas y exacerbar y generar odio». Y citó al vicejefe de la Ciudad, Diego Santilli, que había dicho en febrero que ante una segunda ola, debían suspender las clases presenciales: «Al final la idea era de Santilli, ¿qué le pasó? De ahí para acá. Oportunismo, en el peor momento. Están en campaña electoral, ¿se entiende? Nosotros estamos intentando que se muera menos gente».
Otra vez apuntando contra el discurso de Larreta, disparó: «¿De qué consenso me hablan si mientras estábamos discutiendo en reuniones, firmaba un comunicado diciendo que estaba en contra de las restricciones para atentar contra el gobierno? El único consenso es hacer lo que ellos quieren; sino, no hay consenso». Y remarcó: «La otra vez tratamos de consensuar y salieron a decir que las medidas estaban mal con todo su partido. Están haciendo política con esto, me preocupa y me angustia porque la situación es delicada».
Asimismo se refirió a las marchas y cacerolazos por la suspensión de clases presenciales, señalando directamente a Patricia Bullrich: «No sé si hay buenos y malos, halcones y palomas, pero ayer vi en la televisión que estaba la presidenta de la oposición enfrente de la Quinta de Olivos con un grupo de gente, insultando al presidente a viva voz». Y mencionó al expresidente, Mauricio Macri: «A veces pienso si no sería mejor que venga directamente Macri a discutir con nosotros».
Para cerrar, volvió a apuntar contra los grandes líderes de la oposición y mostró su sorpresa: «Pensamos que Larreta era diferente, por tener responsabilidad de gestión, pero finalmente es igual al resto. Que venga Macri a discutir, qué medida le parece bien tomar. Me parece más genuino, sincero y fácil». Mientras que sentenció: «Uno se hace el blando, el otro el duro y después van todos para el mismo lado. En el medio, nosotros estamos tratando de combatir la pandemia y cuidar a la gente».