El Subdirector Junio Amaral del Partido Social Liberal (PSL-MG), presentó un proyecto de ley para criminalizar la organización de fiestas al aire libre, como bailes funk, que no cuentan con la autorización de los organismos competentes para operar.
El parlamentario acusa que cuando actuó como policía militar fue testigo de «innumerables disturbios» causados por este tipo de partidos en las favelas, entre ellos la pérdida de la tranquilidad de los residentes, el aumento del tráfico de drogas y la violencia.
Esta no es la primera vez que el funk ha sido blanco de un intento de criminalización. Una sugerencia popular en el Senado tenía la intención de convertir el funk en un delito para la salud pública de niños, adolescentes y la familia, en 2017. Pero el proyecto de ley fue rechazado por la Comisión de Derechos Humanos y Legislación Participativa.
El baile funk es a menudo la única opción de ocio para toda una comunidad. El intento de criminalizar el funk causa violencia extrema, como el caso del balón DZ7 en Paraisópolis, una noche de terror que dejó a 9 jóvenes sin vida y docenas heridos.
¡No es el funk lo que promueve la violencia, sino la opresión contra ella!
Fuente: Midia Ninja