El Gobernador evitó un acto en la Casa de Gobierno y se refugió en su despacho. Horas decisivas para buscar un acuerdo y evitar el default.
No fue un viernes sencillo en el gobierno de Axel Kicillof, el Gobernador necesitaba que al menos un 75% de los acreedores acepten su propuesta de aplazar a mayo el pago de u$s 250 millones de capital. Sin embargo, tras la respuesta negativa de los bonistas, el gobierno volvió a extender el plazo hasta el lunes.
Los días pasan y el margen de maniobra cada vez es menor, casi mínimo. El gobierno seguirá negociando durante el fin de semana y si el lunes no llega una respuesta positiva por parte de los acreedores, Kicillof podrá esperar 48 horas más para continuar la negociación. El plazo final es el 5 de febrero a las 13.
En las próximas horas podría haber otro intento para seducir a los acreedores. Kicillof debería mejorar la propuesta que hizo esta semana de pagar anticipadamente los intereses que generaría el aplazamiento del pago al 1 de mayo, unos US$ 7 millones. Una opción que circula es la posibilidad de pagar una parte del capital ahora y postergar el resto.
Redacción AFEN